Luna Azulada
Allá enfrente te presiento (te veo)
exhumando el cadáver de mi sueño.
Alocada nigromante,
evocadora del luctuoso pasado,
¡cómo prendes los vanos restos,
cómo esparces las cenizas, riendo,
entre las voraces olas de la otra orilla,
agitando tus blancas manos
en la azulada neblina!
No es mi fantasía disipada
lo que motiva mi angustia.
Vestida con un tenue ropaje blanco
que transparenta tu cuerpo,
corres por la playa desierta
con los brazos extendidos,
con tu reflejo expandido
como si estuvieras casi muerta.
Ella dice:
A pesar de las adversidades del tiempo y la distancia, de esas tormentas que el dia a dia nos pone en el camino, es preciso mantener siempre el corazón con luna clara para poder seguir teniendo este sentimiento que nos hace ver brillar el sol detras de las nubes negras que se nos ponen delante, porque estando juntos la tempestad se vuelve calma y el sonido de las gotas al caer se convierte en dulce melodia
El dice:
Nace el año y con cada uno de sus días y sus noches renacen y se estampan
en el alma las palabras divagantes que de cada encuentro, de cada caricia, y de
cada pasión o fantasía desbordadas encuentran en un verso o en silencios su
culminación inconfesada, y por testigos nuestros estarán el sol ruborizado y la
risueña luna bajo cuyo amparo el romance entre nosotros también volverá a
aparecer con el mañana
No hay comentarios.:
Publicar un comentario