Llega la mañana...

Con la primera luz mañanera

oigo mi nombre desde tu orilla

me roza la tibieza de tu aliento

y me sorprendo enrojecida.

.
Sumergiédome entre las olas

pretendo acallar mis sentidos

contra viento y marea de besos

disfruto este amor prohíbido.

.
Hay ley mordaza a mil agujas

que van recorriendo mis venas

cual mensajeras de un destino

que gritan..Eres mujer ajena!

.
Entregándome a este embrujo

placentero cuando amanece,

la vaga sensación de lejanía

con la oscuridad desaparece

.
Inevitable volverá el encierro,

cárcel construída en mi mundo,

no seas cruel señor del tiempo

detened tu carrera un segundo.

.
Ha de volver con este infierno

del frío silencio de sus palabras

dejame disfrutar de este cielo

que siento cuando él me habla

.
Alargo mi mano hasta tu mundo

te invito que juguemos los dos

ya llegará de nuevo la tristeza

cuando empiece a caer el sol.